De alumnos a instructores: los encargados del Curso de Cuidados de Heridos en Combate (C4)

Concón. Durante seis días, el Fuerte Aguayo, dependiente de la Infantería de Marina (IM) de la Armada de Chile, es el escenario donde se desarrolla el Curso de Cuidados de Heridos en Combate (C4), dirigido a personal uniformado y civiles del área de la salud.

Los encargados de impartir los conocimientos son los instructores: profesionales médicos y de sanidad que trabajan en la Armada de Chile, la Fuerza Aérea, el Ejército y el Servicio de Salud Metropolitano. Ellos, alguna vez alumnos, ahora entrena y explican cómo actuar ante una situación de conflicto.

Experiencia e instrucción

La Condestable del Curso, Suboficial Mayor de Sanidad Naval Fanny Caamaño, lleva siete años como instructora del C4, y, antes de asumir este rol, fue alumna del curso. Consultada al respecto, aseguró que "es un orgullo representar al personal de Sanidad Naval y entregar los conocimientos adquiridos para capacitar, instruir y reentrenar, no solo a nuestro personal, sino también a las demás instituciones e invitados".

Sobre la evolución de participante a instructora, la Suboficial Caamaño destacó: "Es una alegría ver la capacidad que tienen, cómo han evolucionado, cuánto han aprendido y que poseen el espíritu para enseñar. Yo también fui alguna vez alumna de este curso, entonces para nosotros, y para mí en particular, es un orgullo tenerlos como colegas".

Una de las instructoras civiles en el C4 es la doctora Ximena Groove, médico del Servicio de Salud Metropolitano y especialista en medicina y procedimientos de emergencia. Participa desde 2008 y hoy cumple un rol docente cuyo objetivo es entrenar en diversos ambientes hostiles. "Yo vivo en ambulancias, y la realidad que enfrentamos tiene mucho de lo que se ve en una situación de conflicto bélico. Atendemos a enfermos y lesionados de diversa consideración", explicó la doctora Groove.

"Hemos aprendido varias maniobras y formas de resolver situaciones, tal como lo haríamos en una guerra, conocimiento que nos ha sido de gran utilidad", aseguró Ximena Groove.

Conocimiento y experiencia

Al ser un punto de encuentro para el importante contingente naval, militar y aéreo, es esencial que las ramas de las Fuerzas Armadas también compartan conocimiento y aprendan entre sí.

Tal es el caso del Sargento Segundo Álvaro Vásquez, perteneciente a la División de Salud del Ejército, quien destacó lo gratificante que ha sido su experiencia en el curso y como refleja el trabajo conjunto realizado durante la pandemia del COVID-19: “Refuerza nuestra capacidad de interactuar, y es muy satisfactorio saber que nuestro lenguaje de enfermería a nivel interinstitucional es el mismo”.

Por otro lado, hay quienes permanecen interesados en enseñar a los próximos alumnos. El Sargento Primero Enfermero IM Pedro Caballero declaró que, tras varios años, “decidí postular para ser instructor e incrementar mis conocimientos, con el objetivo de entregarlo a los más jóvenes que ingresan a la Armada, ya que este es un curso que permite aumentar las competencias del personal de salud”.

Durante estos seis días, la labor de quienes dirigen y transmiten su experiencia a los médicos, enfermeros y técnicos frente a situaciones de emergencia toma una labor de alta relevancia. Aquí logran entrelazar la experiencia con el conocimiento para formar a profesionales preparados para abordar situaciones en escenarios complejos.